COMO CAMBIAR LAS RUEDAS DE UNA VENTANA CORREDERA

LAS RUEDAS DE UNA HOJA CORREDERA

     Las ruedas de las hojas de una ventana corredera es la parte más importante de su funcionamiento. Son las responsables de su deslizamiento y de su buena operatividad. En las ventanas de aluminio más grandes son cuando sufren más en su funcionamiento, debido a que soportan todo el peso de la hoja. 

    Por ello es indispensable que en las ventanas más grandes los rodamientos de las hojas sean de mejor calidad.

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TIPOS DE RUEDAS DE VENTANAS DE ALUMINIO 

   Existen numerosos y diferentes clases de ruedas, tantos como diferentes tipos de perfiles de hojas correderas existen. Por tanto no hay ruedas "standard" para todas las correderas, ya que las ruedas se tienen que adaptar al milímetro y encajar perfectamente en el interior del perfil de la hoja.

   Hay muchos tipos de ruedas correderas, para las más grandes y de más peso las más aconsejables son las ruedas tándem (dos rodamientos en una misma carcasa) que sean de aguja (ya que este tipo de rodamiento soporta más peso) y por supuesto graduables, para ajustar la altura de la hoja fácilmente.

RUEDA DE CORREDERA ESTROPEADA

   Al ser la pieza de la corredera que soporta el peso y la responsable de su deslizamiento, es también la pieza de la corredera que más se estropea. Para cambiar la rueda (ver video arriba) deberemos primero sacar la hoja del marco y desmontar la hoja en uno de sus ángulos inferiores aflojando su escuadra.

   Al sustituir la rueda estropeada por otra nueva, deberemos mostrar la rueda que hemos sacado para tener otra nueva idéntica o de otra clase pero que se adapte a nuestro perfil de la hoja. Así, es aconsejable sustituir la rueda estropeada por otra de más calidad.

MANTENIMIENTO DE UNA VENTANA CORREDERA

   Para un buen funcionamiento de la hoja es aconsejable un mínimo de mantenimiento. Tener las hojas ajustadas y equilibradas es el primer paso. Es necesario también una limpieza diaria de los carriles inferiores del marco, ya que elementos extraños se pueden adherir a los rodamientos y provocar un mal funcionamiento de los mismos.

   Un último consejo personal, es la lubricación de las partes móviles de la hoja o puerta corredera, como son las ruedas y los cierres.

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